Tauro y Libra: Compatibilidad en el amor, el sexo y la vida. Cuando Tauro y Libra se juntan en el amor o en cualquier tipo de relación, es embellecedora y armoniosa, pero también superficial a veces. Estos dos buscadores de placeres aman las cosas más finas de la vida, pero querrán estar seguros de que también comparten los mismos valores. Una relación Tauro-Libra es cálida y acogedora, ya que ambos son igualmente encantadores y desarmantes.
Tauro y Libra ¿Cómo coinciden sus signos?
Dónde encajáis
Tanto Tauro como Libra están regidos por Venus, el planeta de la belleza y la armonía. Como pareja, sois la personificación del encanto… y además sois fáciles de ver. Las flores, la música, la ropa de diseño… os encanta todo lo que sea de alta gama y a medida. Si creáis una familia juntos, vuestro hogar se convertirá en el centro de las celebraciones navideñas.
Donde chocáis
Genial en la superficie, pero ¿qué hay debajo? Sin embargo, tu relación puede centrarse demasiado en lo superficial, así que asegúrate de que compartes valores comunes antes de decir «sí, quiero». El indeciso Libra puede frustrar al organizado Tauro al negarse a dar un «sí» o un «no» rotundo a los elaborados planes del Toro. Tauro es más hogareño que Libra, y le gusta que todo esté bien ordenado. La costumbre de Libra de desparramar la ropa por la habitación después de una noche de compromisos sociales consecutivos podría ser un punto de fricción importante.
Tauro y Libra Amor y Compatibilidad por Elementos
Tauro es tierra y Libra es aire
¿Pareja extraña astrológica? Vuestros signos se mueven a dos velocidades operativas muy diferentes, lo que puede crear extraños problemas de sincronización o convertiros en un poderoso dúo si jugáis con vuestros puntos fuertes. A los signos de tierra les gusta la estabilidad y tienden a querer que las cosas sigan igual. Por el contrario, los signos de aire siempre están en movimiento; los «vientos de cambio» siempre soplan para estos signos que buscan la variedad.
¿Otra gran diferencia? Los signos de aire comunicativos son habladores, pero no siempre cumplen lo que dicen. Los signos de tierra son hacedores que prefieren dejar que sus acciones hablen más que sus palabras.
Su vínculo es intenso, tácito, casi secreto en cierto modo.
Debido a la naturaleza arraigada del signo de tierra, el signo de aire puede encontrarlos poco aventureros o «aburridos», atrapados en una rutina estancada. Es posible que la pareja de aire no reciba la espontaneidad y las sorpresas que mantienen su interés. La pareja de tierra puede ver a la pareja de aire como una persona escurridiza y llena de «aire caliente», que sólo habla y no actúa. O bien, los cambios vertiginosos pueden hacer que el signo de tierra se sienta desestabilizado y ansioso, incapaz de planificar el futuro sin sentirse saboteado desde la izquierda.
Entonces, ¿cómo se puede lograr el equilibrio? La mejor manera de trabajar juntos es cuando el signo de aire aporta ideas interesantes y el signo de tierra las convierte en una realidad tangible. El signo de aire tendrá que esforzarse más por cumplir sus promesas. Habrá que seguir alguna medida de rutina y coherencia, incluso si el signo de aire aborrece la tradición.
¿Una solución para romper la «monotonía» de, por ejemplo, otra Navidad familiar? Deja que el signo de aire social planifique las fiestas, las listas de reproducción, la decoración, el menú y otros detalles creativos. Y permitir que se añadan algunas caras nuevas a la lista de invitados. De este modo, se satisfarán las necesidades de novedad y consistencia.
El signo de tierra tendrá que ser más flexible y abierto, dispuesto a probar las nuevas ideas que introduzca el signo de aire. La pareja de tierra tendrá que aprender a ser más espontánea en lugar de insistir siempre en un plan. A cambio, el signo de aire deberá atenerse a ALGUNA parte del plan, sin cambiar la hora, llegar tarde o invitar a acompañantes al azar en el último momento.
En astrología hay cuatro elementos: fuego, tierra, aire y agua. Cada uno de ellos desempeña un papel importante en el conjunto de la humanidad. Un encuentro amoroso con alguien de un elemento astrológico diferente puede ser un reto, pero también una hermosa oportunidad para evolucionar. Al fin y al cabo, las diferencias os empujan a ambos a crecer y a salir de vuestra propia experiencia.
Tauro y Libra Amor y Compatibilidad por Polaridad
Tauro es el yin y Libra el yang
En astrología, cada signo tiene una «polaridad»: eres yin (femenino) o yang (masculino). En tu pareja de signos, Tauro es un signo yin receptivo y Libra es un signo yang asertivo. Cuando se trata de sus puntos fuertes, se equilibran mutuamente, aportando cada uno un conjunto de habilidades diferentes pero complementarias. Cuando las cosas no funcionan, pueden polarizarse.
El signo yin puede ser demasiado pasivo (o pasivo-agresivo) y sacrificado, mientras que el signo yang puede actuar de forma dominante, agresiva y egoísta. Para reequilibrarse, el signo yin necesita trabajar para ser más abierto, directo y confiado, mientras que el signo yang debe cultivar más paciencia, tolerancia y sensibilidad.
Tauro y Libra Amor y Compatibilidad: Sus aspectos
Tauro y Libra están en quincuncio (cinco signos de diferencia)
En las coincidencias amorosas de la astrología, también medimos la compatibilidad por el aspecto, o la distancia, entre los dos signos. Sus signos están en quincuncio, es decir, separados por cinco signos. Se trata de una combinación fascinante y compleja que desafía la explicación: la extraña pareja original. Te sentirás como si estuvieras con tu alma gemela o con el diablo encarnado… o, al menos, con una especie de extraño extraterrestre que lo hace todo de forma muy diferente a como lo harías tú. «¿Cómo han acabado esos dos juntos?», se preguntará la gente.
Su vínculo es intenso, tácito, casi secreto en cierto modo. La persona que está a cinco signos de distancia de tu signo no tiene nada en común contigo astrológicamente. Tendréis que adaptaros a vuestras diferencias, lo que podría suponer una gran adaptación, incluso descartar un estilo de vida anterior. Para uno de vosotros, la relación será de sexo e intimidad; para el otro, de deber y servicio. Si ambos han hecho el trabajo de autoconocimiento necesario, pueden formar un equipo formidable si unen sus fuerzas. También pueden unirse por motivos kármicos, por ejemplo, para tener un hijo o curar viejas heridas, quizás incluso de vidas pasadas.